domingo, 21 de marzo de 2010

Malabares

Tengo la inmensa suerte de contar con las reflexiones de un manager excepcional, Antonio Alemán al que debo el título del artículo. Antes yo reflexionaba con los directivos acerca del arte de dirigir evocándoles el trabajo del malabarista que se afanaba en hacer girar platos, cada uno sobre un palito. Les decía que el secreto consistía en hacer girar nuevos platos a la vez que reactivaban aquellos que estaban a punto de perder su impulso giratorio. En eso llegó Antonio y me dijo “El manager tiene dos trabajos:

• Conseguir sus objetivos de manera recurrente, haga buen tiempo o crisis.
• Devolver el equipo que su organización le encomendó en muchas mejores condiciones que cuando lo recibió.

Y repara José Antonio –me dijo- en que sólo consiguiendo el segundo podrá conseguir el primero. Por eso hay que hablar de managers malabares”.

Pues así es y así se queda.

No hay comentarios: